La marca se desdice de su apuesta porque el atleta estaba calzando unas Nike cuando batió el récord de velocidad en la prueba de las 40 yardas
Adidas prometió regalar una isla a quien batiese el récord de velocidad de la prueba de las 40 yardas en la Combine de la NFL, que ostentaba Chris Johnson desde el año 2008, cuando lo dejó establecido en 4.24 segundos. Un propuesta muy real, pero que no se cumplió, a pesar de que hace pocos días John Ross, receptor de la universidad de Washington, lograse superar la marca. Y todo por la letra pequeña.
En la letra pequeña de su apuesta, la marca deportiva establecía que, de lograrse un nuevo récord, el atleta debía estar calzado con zapatos Adidas, por lo que no entregaba la isla al jugador, ya que Ross había utilizado calzado unas zapatillas Nike, por decisión propia, cuando dejo el listón en 4.22 segundos en la prueba de las 40 yardas.
La historia es novelesca porque se trataba de una estrategia de ambush marketing en un evento patrocinado por Under Armour y que suele contar con cierta presencia de Nike, pero en la que Adidas había logrado colarse con éxito. A pesar de ello, esto duró hasta que se batió el récord. En ese momento, la atención estuvo en la marca alemana, cuya oferta quedo deslucida, mientras que el atleta, con humor, señalaba a los medios que no había usado Adidas porque no "no nadaba bien y no tenía barco."
A pesar de ello, después de toda la polémica, el atleta no se ha quedado con las manos vacías. Después de lograr el récord, Nike le ha incorporado a su plantilla de patrocinados. De este modo, aunque Ross se quedó sin la isla valorada en hasta un máximo de 1 millón de dólares, ha ganado un contrato comercial con otra gran marca, además de tener, según los expertos en el tema, un prometedor futuro en la NFL.
La noticia "Adidas prometió una isla (literal) a quien rompiese el record. John Ross lo logró, pero la marca no se la dio… ¿Por qué?" fue publicada originalmente en Revista Merca2.0.