Con él las empresas han creado tejidos inteligentes que responden a los gestos y al tacto para controlar dispositivos inteligentes

Levi's y Google se han unido para dar una nueva dimensión a los tejidos y de esta unión ha salido el Proyecto Jacquard. Mediante este proyecto, es posible dotar de interactividad mediante el tacto y el gesto a cualquier tejido, con telares industriales. Estos tejidos interactivos los han conseguido gracias a hilos conductores, que combinan hilos finos y metálicos con hilos naturales y sintéticos, como el cotón o el poliéster. De este modo, se pueden coser estos hilos conductores en todos los tejidos y, además, se pueden añadir también cuadrículas de sensores, creando superfícies grandes e interactivas.

Los complementos adicionales para estos tejidos se han diseñado para que sean discretos. Es por ello por lo que los conectores y circuitos a los que se conectan los hilos son pequeños y, de hecho, no superan el tamaño de un botón. Toda esta tecnología miniaturizada capta los movimientos del usuario y, además, los memoriza, utilizando algoritmos. Este tacto y estos gestos capturados se transmiten, mediante wireless, a los dispositivos para controlar un seguido de funciones, conectando al usuario a un seguido de aplicaciones, servicios online o características del móvil. 

Desde el año 2012, el mercado de la tecnología wearable, es decir, que se puede llevar puesta, ha ido cogiendo fuerza. De este modo, los desarrollos tecnológicos tienen como objetivo amoldarse al estilo de vida de sus usuarios, convirtiéndose en meros complementos que les faciliten la vida con la mayor facilidad de uso y portabilidad. Según las estimaciones de el Trasnparency Research Market, este mercado ha llegado, este 2017, a un valor estimado a nivel global de 4.120 millones de dólares.

La compañía Google, fundada en 1998, superó recientemente a Apple como marca más valiosa del mundo, con un valor estimado de 109.500 millones de dólares, según el informe Brand Finance Global 500. Por lo que hace referencia a su nuevo compañero de equipo, Levi's, la marca estadounidense fundada en 1853, ha sufrido una caída en su valor de marca de un 16%, es decir, de más de 400 millones de dólares.