Más de 800 alumnos de nuevo ingreso recibió la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), la ceremonia de bienvenida se realizó en el Gimnasio Universitario de esta casa de estudios.
En su mensaje de bienvenida, el Vicerrector Académico de la UAG, Dr. Jorge Sánchez González, dijo que la UAG ha propugnado por un reforzamiento de los niveles de calidad académica, pedagógica y científica de los distintos programas de cada una de las licenciaturas y postgrados, los que se encuentran en proceso constante de acreditación y nuevas certificaciones nacionales e internacionales que consoliden, a esta casa de estudios, como una universidad de Clase Mundial.
La Autónoma de Guadalajara ha desplegado grandes esfuerzos para mejorar de manera paulatina y continua toda la infraestructura en instalaciones, laboratorios, aulas y sistemas. Se han modernizado los equipos didácticos en beneficio de los alumnos para un mayor aprovechamiento y aprendizaje, agregó el funcionario académico.
Por su parte, el Decano de Ciencias de la Salud de la UAG, Dr. Antonio Rivera Cisneros, hizo hincapié en el entusiasmo que llena a autoridades y docentes en recibir a este numeroso grupo de futuros médicos. Los mejores testimonios, de la calidad educativa de la UAG, son sus egresados, dijo. La Universidad Autónoma de Guadalajara tiene más de 125 mil egresados en diferentes partes del País y del mundo en posiciones de liderazgo.
De la misma manera, en esta ceremonia de bienvenida y orientación, representantes de diversas áreas de la UAG y de la Facultad de Medicina explicaron las funciones que realizan y cómo ayudan en la formación académica de los alumnos. Entre ellos el Dr. Roberto Martínez Ibarrarán, Jefe del Departamento Académico del Programa en Medicina en la Comunidad (PMC), explicó las grandes oportunidades que el alumno de Medicina de la UAG tendrá para aplicar sus conocimientos ayudando a diversos pacientes.
Bata Blanca, ícono del médico
Luego se realizó la ceremonia de la imposición de la bata blanca, símbolo que distingue al médico en su labor de aliviar el dolor de sus semejantes, pues también se le conoce como la imposición de la capa o manto de la compasión.
El uso de la bata blanca se remonta al siglo XIX cuando un grupo de médicos decidió romper con las tradiciones antiguas y pasar al nuevo mundo de la ciencia. La bata blanca es ya un ícono del médico y le da reconocimiento y autoridad, siendo un signo de excelencia e identificación del profesionista de la salud. La bata blanca es la guardiana del quehacer diario en la profesión médica, profesión a la que los nuevos estudiantes han decidido dedicar su vida.
La bata blanca es un compromiso simbólico con la salud y ha sido portada por grandes hombres que han librado grandes batallas contra la enfermedad, como hoy en día se habrán de enfrentar contra el virus del ébola, por ejemplo.
Durante la ceremonia se impuso a los estudiantes de primer grado su primera bata blanca, que los distingue como futuros médicos.