La inclusión financiera en México continúa en ascenso, con avances en bancarización, número de cuentas y expansión de la infraestructura de pagos digitales, lo que permitió que la proporción de transacciones y transferencias electrónicas per cápita pasara de 37 en 2018 a 44 en 2020, un aumento anual del 4 por ciento en promedio. Este aumento en la pandemia ocurrió en la suma de terminales punto de venta; Entidades de Ahorro y Crédito Popular y agregadores que mostraron un aumento del 26 %.
De acuerdo con Tory Jackson, jefe de Desarrollo de Negocios y Estrategia para América Latina de Galileo Financial Technologies, el ecosistema de servicios financieros de México evoluciona rápidamente, jugadores tradicionales y de tecnología financiera están abordando otros aspectos de la inclusión con innovaciones que permiten a los consumidores y a las empresas pasar rápidamente a las transacciones digitales de formas que no podrían haberse previsto hace tan solo un año.
Quizás 2022 sea momento de redefinir de la inclusión financiera centrada en:
- Acceso a innovaciones y comunicaciones que hagan a las transacciones digitales atractivas y convenientes que el efectivo.
- Disponibilidad y uso de tecnología financiera que facilite el crédito y los préstamos a personas con poco o ningún historial crediticio.
- Eliminar el concepto de, inclusión financiera se aplica solo a los pobres o no bancarizados.
Si bien es cierto que el crecimiento del comercio electrónico y la mayor aceptación de los pagos electrónicos por parte de los minoristas físicos también reducen la necesidad de efectivo, este último sigue siendo el método de pago preferido en México. El desafío para el sector de servicios financieros es fomentar el acceso a alternativas al efectivo y combatir la falta de capacidades digitales con productos que se adapten fácilmente a la vida de los consumidores.
El enfoque de la inclusión financiera está asociado al acceso al crédito, los pagos constituyen una gran parte de la historia de la inclusión. La tecnología API de Galileo permite a los actores financieros y no financieros crear productos digitales que aumentan el acceso a los pagos digitales al mismo tiempo que eliminan las barreras tecnológicas y financieras.
Galileo, junto con los proveedores de crédito digital, habilitan sistemas que incorporan la actividad del móvil de un usuario, las transacciones de móviles y los reembolsos de préstamos anteriores para ofrecer pequeños montos de préstamo desembolsados en la cuenta de dinero móvil de un cliente. De manera similar, el modelo BNPL habilitado por Galileo crea una experiencia de pago a plazos rápida y accesible para el cliente, al tiempo que permite a los comerciantes aumentar las ventas al ofrecer crédito en el punto de venta.
Para lograr una inclusión financiera, las personas, así como las empresas, deben tener acceso a productos y servicios financieros asequibles, además de garantizar que puedan realizar transacciones digitales implica brindar a las personas y empresas productos que satisfagan sus necesidades: transacciones, pagos, crédito y seguros.
El objetivo es proporcionar a esos innovadores los elementos tecnológicos que necesitan para hacer realidad esas innovaciones.