Por su importante labor en la promoción y preservación de la cultura a través del Son Jarocho y el folklor veracruzano, como parte de las actividades de las Fiestas de la Candelaria Tlacotalpan 2015, el gobernador Javier Duarte de Ochoa, acompañado de su esposa, Karime Macías Tubilla; el secretario de Turismo y Cultura, Harry Grappa Guzmán y el alcalde, Homero Gamboa, entregó las medallas Guillermo Cházaro Lagos, Andrés Vega Delfín y Rodrigo Gutiérrez Castellanos, a Raymundo Domínguez Gallardo, Dionisio Vichi Mozo y Honorio Robledo Tapia, respectivamente.
Los tres veracruzanos fueron galardonados por su destacada trayectoria en el marco del XXXVI Encuentro Nacional de Jaraneros y Decimistas, que permite, además, honrar la memoria de los grandes músicos y poetas del Son Jarocho.
Los premiados fueron reconocidos como promotores de la Cultura Veracruzana y por su vocación para promover la historia, la cultura, el folklor y la tradición veracruzana.
Raymundo Domínguez Gallardo, merecedor de la presea Guillermo Cházaro Lagos, tiene 84 años de edad y es originario de Santiago Tuxtla, inició versando desde los 11 años; hasta la fecha sigue participando activamente en los fandangos regionales, siendo un referente obligado de la versada popular, donde cuenta con un amplio repertorio.
Se distingue por respetar la autoría de versadores, maestros de vida, y es digno representante de la juglaría; lo reconocen por su estilo de verso y su forma de compartirlo. Don Raymundo no sabe leer y escribir, finca su arte en su prodigiosa memoria que hasta la fecha posee, mezclándose y compartiendo con los jóvenes hoy en día.
Dionisio Vichi Mozo, de 96 años, ganador de la medalla Andrés Vega Delfín, también es originario de Santiago Tuxtla. Desde su infancia formó parte de los músicos que fueron registrados en los discos del INAH en 1969 por Arturo Warman, junto con artistas de talla de Francisco y Ángel Trujillo, así como Juan Zapata, es considerado como uno de los pilares del fandango y reconocido por su destreza al ejecutar su aguda guitarra de son, así como su distintivo canto con aires tuxtlecos.
Honorio Robledo Tapia es fundador del Encuentro de Jaraneros de California, que se celebra desde el año 2002 y que se ha convertido en el festival jaranero más importante fuera de México. Es escritor e ilustrador de libros infantiles sobre la cultura jarocha; sus libros son: Bemberecua, Hazañas de Don Pedro Lira y El Toro Zacamandú; actualmente tiene en espera, con Artes de México, la edición El niño y el vado, en coautoría con el antropólogo Alfredo Delgado Calderón.
Realizó el video documental Narradores delirantes del Sotavento, que recopila el testimonio y las historias de 62 cuenteros y narradores de la región; es compositor de sones jarochos y su disco Senderos se ha convertido en una de las más notables aportaciones al son contemporáneo. En esta edición de las Fiestas de la Candelaria se hace merecedor de la medalla Rodrigo Gutiérrez Castellanos.
Grappa Guzmán agradeció el compromiso y esfuerzo de los músicos veracruzanos que promueven, a través de sus versos y composiciones, la riqueza y tradición de todas las regiones.
El titular de la Sectur reiteró el compromiso para hacer de este tradicional encuentro con la identidad, una plataforma de proyección y promoción de la cultura, la entidad y su historia.
Agregó que con esta entrega se reconoce la vida, obra, tenacidad y contribución de tres notables hombres, que se han dedicado a la creación, difusión y conservación de notas y décimas que nos recuerdan quiénes somos y de qué estamos hechos los veracruzanos.
“Estimados maestros, por su destacada aportación, ustedes los decimistas, versadores, jaraneros, los indispensables, el pueblo y el Gobierno de Veracruz, les estamos muy agradecidos porque han entregado su vida a mantener latente nuestra tradición; porque han demostrado su extraordinario ingenio, su devoción artística y su amor a la cultura popular, y porque nos han legado su ejemplo, sapiencia y creación”.
Precisó que las Fiestas de la Candelaria son sinónimo de hermandad, alegría, arte y talento, que refrenda la vocación turística de la región y la entidad; por esa razón, reiteró su compromiso para fortalecer la promoción, proyección y el liderazgo del Son Jarocho, que muestra con sus versos la grandeza de Veracruz.
Tanto el Encuentro Nacional de Jaraneros y Decimistas, como la entrega de preseas, son un homenaje a los grandes músicos y compositores que propagan la herencia histórica y cultural, formando parte de una importante celebración como son las Fiestas de la Candelaria en Tlacotalpan, que promueven la región y el liderazgo turístico de Veracruz.
Tlacotalpan, Ver., 01 de febrero de 2015